Industrias de Alimentos Palma Verde SA, asentada en Chapare y dedicada regularmente a la producción de palmito en conserva para la exportación, sorprendió hace dos años al presentar una combinación enlatada: quinua con frijol (rojo y negro), ideal para un plato rápido y nutritivo.
Hace unos días, volvió a sorprender, esta vez con una mezcla que a muchos podría parecer impensable, pero que ha sido recibida con mucha aceptación: quinua con piña en almíbar. El resultado fue un éxito, y la propuesta acaba de merecer un sello de plata en un concurso organizado por el Ministerio de Desarrollo Productivo del Gobierno.
Según el gerente general de la empresa, Yuri Maldonado, la idea surgió después de varias pruebas y de observar gustos del mercado internacional. En el país, esta combinación no es habitual, pero ya se hicieron degustaciones en ferias, y el público respondió con beneplácito, por lo que ahora, cumplidos todos los trámites legales y de sanidad, el producto entra al mercado.
Por el poder nutritivo de la quinua, además de las vitaminas que aporta la piña, se la recomienda como desayuno o postre.
No necesita preparación. Basta con abrir la lata y, si el cliente considera el jugo muy dulce, escurrirlo.
Algo parecido ocurre con las combinaciones de quinua con frijol. Sólo hay que escurrir la salmuera y disponer el producto para una cena o almuerzo, pues el contenido puede suplir perfectamente a un plato de arroz o de fideo, además de estar libre de gluten.
El Gerente explica que Palma Verde, tradicionalmente produce palmito en conserva y lo exporta a países del Cono Sur de la región, como Argentina, Chile, Uruguay y Paraguay.
Sin embargo, el mercado de este producto actualmente se encuentra en descenso para la oferta boliviana debido a la competencia que ofrece el palmito ecuatoriano, que logra una producción a menor costo y que termina imponiendo los precios en el mercado internacional.
Por ello, Palma Verde decidió diversificar sus productos extendiéndose a la quinua, un grano con el que tendría menor competencia a nivel internacional. De este modo, se adquirió el cereal de Oruro y se fueron probando las fórmulas hasta dar con la combinación ideal. Todos los productos mencionados estarán desde el próximo año en supermercados de la ciudad, según promete el Gerente.
La quinua y piña en almíbar viene en una lata de 270 gramos, y se prevé que sea ofertada a un precio de entre nueve y 10 bolivianos.
En tanto que la quinua con frijol rojo y negro llegará en una presentación de 420 gramos y costará entre 12 y 13 bolivianos.
"Las conservas son altamente nutritivas y listas para consumirse"
EL PREMIO
Por todas las propuestas expuestas, Palma Verde acaba de ganar el sello de plata en la categoría Organizaciones Innovadoras, en el “Premio Nacional a la Excelencia para el Vivir Bien”, organizado por el Ministerio de Desarrollo Productivo del Gobierno.
El Premio es un galardón oficial y máximo reconocimiento que el Estado otorga a las unidades productivas e innovadoras en reconocimiento a su capacidad e innovación.
Este galardón tiene el apoyo de la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia.
Este año participaron 190 instituciones, de las que 15 fueron premiadas por sus aportes de innovación y contribuciones a la seguridad alimentaria.
Según explica el gerente de Palma Verde, Yuri Maldonado, no hay ningún monto económico en el premio, pero la empresa logra el derecho de llevar el sello en las etiquetas, lo que otorga un plus en la imagen y garantía de calidad del producto.
LA EMPRESA
Industrias Palma Verde SA es una empresa privada fundada en 2009 y que se presentó al mercado por su producción de palmito en conserva.
Es una empresa privada compuesta por varios accionistas, siendo la principal la fundación IES.
Tiene una oficina central en Cochabamba y su planta está ubicada en Ivirgarzama, en el trópico cochabambino.
Allí concentra el palmito directamente de los productores, y se provee de la quinua de comunidades de Oruro, mientras que el poroto llega de Santa Cruz.
Durante su última gestión, Palma Verde alcanzó volúmenes de exportación superiores a los 2 millones de dólares, sobre todo a los mercados de Chile, Argentina, Uruguay y Paraguay.
La empresa cuenta con más de 70 trabajadores, todos ellos capacitados en la industria de los alimentos en conserva. El gerente, Yuro Maldonado, tiene una experiencia de más de 20 años en estos proyectos.