La quinua, producto estrella que promociona el Gobierno para el consumo de los bolivianos y el mundo, es un cereal inalcanzable para los bolsillos de la gente común.
En visita a los mercados realizado por Erbol, se evidenció que el grano de oro cuesta hasta tres veces más que otros cereales y alimentos. La libra de fideo y el arroz no superan los 4 bolivianos la libra, la lenteja está en 5 bolivianos, el trigo en 3, el maní en 7 y el cereal andino oscila de 11 a 14 bolivianos la libra.
Doña Cristina, vendedora de abarrotes del mercado Rodríguez, dijo que la quinua se elevó y desapareció después del lanzamiento del Año Internacional de la Quinua. “Es el más caro de todos”, manifestó.
“La quinua ha subido bastante desde que se ha hecho famosa, antes estaba a 9 bolivianos la bolsa que es menos de una libra, ahora estamos vendiendo a 11 bolivianos; una libra debe estar a 12 ó 13 bolivianos”, señaló.
Evelyn, comerciante del mercado Uruguay, indicó que el grano ya no se vende por libra debido a que ya no está llegando a la ciudad. “Los productores prefieren llevarlo fuera del país”, refirió.
El presidente de la Asociación Nacional de Productores de Quinua (Anapqui), Juan Crispín, declaró que la producción del grano en esta gestión pasará las 65 mil hectáreas.
La producción de quinua en 2012 fue de 50.566 toneladas, 32 por ciento más que en 2011, cuando alcanzó las 38.257 toneladas. Este año se calcula una producción de 58.400 toneladas.
Explicó que la mayor producción se destina al mercado externo especialmente a Estados Unidos, y el consumo interno sólo alcanza al 20 por ciento. Ellos demandan al gobierno implementar políticas de promoción para que suba el consumo per cápita de los bolivianos.
El director de Promueve Bolivia, Iván Cahuya, culpó a los españoles por el bajo consumo interno del alimento. “Nos hicieron creer de manera despectiva que sólo era alimento del indio”, dijo. Para bajar el precio del cereal se prevé ampliar la producción de quinua, apuntó.
“(Los españoles) Han hecho de que el nivel de consumo de la quinua en nuestro medio no sea tan grande como en el mercado externo. Uno de los factores que nosotros le atribuimos a este comportamiento es producto de la colonialidad mental, nos han hecho creer que la quinua era un alimento del campesino sin conocer los valores nutritivos que tiene este producto”, argumentó.
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